El capitalismo intenta invadir todos los rincones del planeta como un cáncer: colonizando sociedades y territorios, expoliando minerales, destruyendo bosques, matando animales de toda especie (humana o no), contaminando, convirtiendo todo en mercancía de compra y venta (seres humanos, animales, territorio, agua, salud, educación, relaciones sociales…). Todo con el fin, no de satisfacer las necesidades humanas, sino de maximizar beneficios privados empresariales para incrementar el volumen de una moneda, en gran parte virtual y en manos en su gran volumen de una reducida y poderosa oligarquía.
La incertidumbre a la que se nos somete a la clase trabajadora, las condiciones laborales y salariales en relación a los precios de los artículos básicos, el desempleo, la desigualdad de oportunidades, acceder a estudios superiores e incluso a la sanidad, así como la destrucción del clima y de todo rastro de vida en el planeta y un largo etcétera, obligan a intensificar y a aunar las luchas contra el capitalismo.
Pero repitiendo las mismas fórmulas no obtendremos resultados diferentes. Los problemas son globales porque las causas son las mismas, y son de clase porque las diferencias sociales cada vez son mayores, y porque quien te explota, te roba o te tiraniza, probablemente hable tu mismo idioma y tenga tu misma nacionalidad.
Porque tu enemigo no puede ser quien sufre las mismas o mayores injusticias que tú por muy lejana y expoliada que sea su tierra de nacimiento.
Partiendo de esas premisas, y de muchas otras, la Asociación Internacional de Trabajadoras/es (AIT) celebrará el 29 y 30 de diciembre de este año su XXVII Congreso en Melbourne, Australia.
Tres sindicatos de Asia piden la adhesión como miembros de la AIT y otro como sección amiga.
Además de los puntos internos para optimizar los recursos y las herramientas de la Internacional, se intentará reforzar la coordinación en las distintas luchas así como en los conflictos multinacionales, el intercambio de información y experiencias, entre otros puntos como jornadas de luchas internacionales, la celebración de centenario de la refundación de la Internacional, o como la propuesta de creación de una editorial para poder apoyar países donde faltan recursos para editar o determinados textos están perseguidos.
A pesar de los intentos de tres sindicatos exmiembros de la AIT, que integrándose en el sistema capitalista han abandonado los principios y métodos revolucionario, y que pretendían desmantelar la Internacional, en este Congreso la AIT sigue creciendo gracias a la gran labor de difusión y contactos del Secretariado y de sección como la ASF de Australia. También se pretender reforzar la coordinación, la cooperación entre los distintos sindicatos, el intercambio de información y experiencias, y sobre todo, la solidaridad con sindicatos de zonas en las que ya sea por el nivel de explotación y expolio capitalista, o por la persecución por parte del Estado, requieren del mayor apoyo posible.
Porque frente a un enemigo y un sistema global solo queda la coordinación de todas las luchas anticapitalistas. Frente al nacionalismo, la falsa unión de clases antagónicas bajo los preceptos de la burguesía y el enfrentamiento entre pueblos, el internacionalismo de las clases trabajadoras. Frente a la barbarie social y la destrucción de la vida, la obligada transformación social libertaria.
Secretariado Permanente de la CNT-AIT de Levante